"Como Madre y Maestra, María nos irá enseñando a acoger la Palabra de Dios con limpio corazón, meditándola y guardándola en lo profundo de nuestra alma. Nos formará en el auténtico espíritu de adoración y reparación, y hará de nosotros instrumentos suyos para la extensión de su reinado maternal, por medio del cual vendrá el reinado de Cristo.
María, Virgen Corredentora, será nuestra guía segura hasta la Cruz de Cristo, sabiduría de Dios y fuente de toda bendición, enseñándonos a hacer de nosotros mismos y de nuestra vida una ofrenda de oblación en unión con Cristo para la gloria del Padre y para la salvación del género humano.
Esta llamada a ser corredentores, completando en nuestra carne "lo que falta a las tribulaciones de Cristo por su cuerpo, que es la Iglesia", es nuestra vocación más alta, y sólo en la "Escuela de María" se puede aprender esta ciencia divina de íntima comunión con Cristo Siervo Sufriente"
Un camino de fraternidad
No hay comentarios:
Publicar un comentario