REGNUM MARIAE

REGNUM MARIAE
COR JESU ADVENIAT REGNUM TUUM, ADVENIAT PER MARIAM! "La Inmaculada debe conquistar el mundo entero y cada individuo, así podrá llevar todo de nuevo a Dios. Es por esto que es tan importante reconocerla por quien Ella es y someternos por completo a Ella y a su reinado, el cual es todo bondad. Tenemos que ganar el universo y cada individuo ahora y en el futuro, hasta el fin de los tiempos, para la Inmaculada y a través de Ella para el Sagrado Corazón de Jesús. Por eso nuestro ideal debe ser: influenciar todo nuestro alrededor para ganar almas para la Inmaculada, para que Ella reine en todos los corazones que viven y los que vivirán en el futuro. Para esta misión debemos consagrarnos a la Inmaculada sin límites ni reservas." (San Maximiliano María Kolbe)

sábado, 31 de mayo de 2014

UN MENSAJE PARA NUESTROS DÍAS

 Con el título, "Apariciones de Nuestra Señora", presentamos un CD con los mensajes que la Santísima Virgen confió a Lucía, Francisco y Jacinta en Fátima, Pontevedra y Tui.
Los destinatarios de estos mensajes de la Madre Celestial somos todos nosotros. Son mensajes destinados a la Iglesia, al Papa y a toda la humanidad. Son mensajes maternales para nuestros días, para nuestro "hoy". Mensajes urgentes que no sólo no debemos silenciar, sino que debemos propagar para que lleguen a toda la humanidad. De su conocimiento y de la puesta en práctica de estas llamadas maternales va a depender no sólo la suerte de la humanidad entera sino también la salvación o la perdición eternas de millones de almas.
¡HAZ TUYO ESTE APOSTOLADO Y COLABORA CON NOSOTROS PARA HACER LLEGAR ESTOS MENSAJES A TUS FAMILIARES, AMIGOS, PARROQUIA...!
¡COLABORA CON LA VIRGEN PARA QUE SUS LLAMADAS MATERNALES PUEDAN LLEGAR A TODOS SUS HIJOS!
¡DIVULGA ESTE CD LO MÁS QUE PUEDAS!


Voz de Nuestra Señora: María José Dios Santiago
Voz del Niño Jesús: Manuel Blanco Folgar
Voz de Hermana Lucía: Mª del Carmen Dios Santiago
Voz del Ángel de Portugal: Juan Ramón Allo Dios


CD "APARICIONES DE NUESTRA SEÑORA. FÁTIMA, PONTEVEDRA, TUI"
DONATIVO: 4 EUROS + gastos de envío
PEDIDOS A: seguirajesus03@gmail.com

SANTA MARÍA, REINA Y MADRE NUESTRA



 Bajo tu amparo nos acogemos,
santa Madre de Dios;
no deseches las oraciones
que te dirigimos
en nuestras necesidades,
antes bien
líbranos de todo peligro,
¡oh Virgen gloriosa y bendita!
Amén.

viernes, 30 de mayo de 2014

PASTOR ANGÉLICO, SANTO SÚBITO!



Señor Jesucristo, te damos gracias por haber donado a la Iglesia al Papa Pío XII, maestro fiel de Tu verdad y pastor angélico.
Él, con doctrina segura y suave firmeza, ha ejercitado el supremo ministerio apostólico guiando Tu Iglesia a través del mar agitado de las ideologías totalitarias, ha abierto los brazos de Pedro, sin distinción, a todas las víctimas de la enorme tragedia de la II Guerra Mundial amonestando que nada se pierde con la paz, obra de la justicia; con humildad y prudencia ha dado renovado esplendor a la Sagrada Liturgia: y ha manifestado la gloria de María Santísima proclamando su Asunción al Cielo.
Haz, oh Señor, que siguiendo su ejemplo aprendamos también nosotros a defender la verdad, a obedecer con alegría el magisterio católico y a dilatar los espacios de nuestra caridad.
Por esto te suplicamos, si es para Tu mayor gloria y para el bien de nuestras almas, glorifiques a Tu siervo, el Papa Pío XII.
Amén
Texto: Don Nicola Bux
Imprimatur: Angelus, Card. Bagnasco

SÓLO TÚ ERES SANTO,SÓLO TÚ SEÑOR, SÓLO TÚ ALTÍSIMO, JESUCRISTO


Ritual pagano en la Catedral de Santiago de Compostela

“MONJES" BUDISTAS Y “SACERDOTES” SINTOISTAS ESCENIFICAN UNA ACTUACIÓN
Una delegación de la ciudad japonesa de Tanabe, y de la prefectura de Wakayama, ha realizado el pasado martes 13 de mayo una visita institucional a Santiago de Compostela. El grupo estaba formado por 70 personas, 30 de ellas “monjes” budistas y “sacerdotes” sintoistas de la provincia de Wakayama.

El alcalde de la ciudad española ha diluido toda la identidad católica de Santiago de Compostela y del camino al pretender que la presencia nipona evidencia la “unión de culturas y creencias” en un espacio de “hospitalidad y concordia” y ha apostado por seguir “trabajando” por “los legados históricos” de ambas regiones y por sus caminos de peregrinación, el Camino de Santiago y el Kumano Kodo. Currás ha establecido paralelismos entre ambas rutas, que “tienen raíces milenarias, pero no son reliquias muertas, satisfacen la búsqueda vital de personas que se encuentran a sí mismas en la ruta”.

Antes de la recepción oficial en el Ayuntamiento de Santiago, la delegación japonesa organizó un espectáculo en la Catedral de Santiago en el que, bajo el nombre ‘Espíritu de Japón’, los “monjes” de la delegación realizaron distintas representaciones de algunos de los ritos tradicionales que forman parte del camino Kumano-Kodo en el que se mezclan sintoísmo y budismo.

Un grupo de “monjes” del templo budista Seigantoji interpretó el «Shugendo», parte de un ritual de ejercicios de las montañas en busca de una mente purificada, y otro grupo del santuario de Koyasan mostró cánticos rituales «Shomyo», cantos buditas utilizados en los rituales nipones. En cuanto al sintoísmo, el “sacerdote” del santuario Kumano Hongu Taisha representó la danza «Noh» y “sacerdotisas” del Kumano Hayatama Taisha exhibieron la danza «Kamunagi-no Mai», compuesta para celebrar el 5º aniversario de la Declaración como Patrimonio de la Humanidad de los Lugares y Rutas de los Montes Kii.














Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad



Dios Padre Misericordioso
Ten piedad de nosotros
Dios Hijo, Camino, Verdad y Vida para el hombre, 
Ten piedad de nosotros
Santísima Trinidad, un solo Dios,
Ten piedad de nosotros
Sagrada Hostia, Amor oculto de Dios
Ten piedad de nosotros
Sagrada Hostia, Vida Divina para los Hijos de Dios
Ten piedad de nosotros
Sagrada Hostia, Semilla de Eternidad
Ten piedad de nosotros
Sagrada Hostia, Multiplicada en el Altar para dar Vida al Mundo
Ten piedad de nosotros
Sagrada Hostia, Que has acampado entre los tuyos y no Te reciben
Ten piedad de nosotros
Sagrada Hostia, Levadura de Unidad entre los que conocen tu Evangelio
Ten piedad de nosotros
Sagrada Hostia, Aniquilada sobre el Altar para dar fortaleza a los Humildes
Ten piedad de nosotros
Sagrada Hostia, Ultrajada por las blasfemias de los hombres
Ten piedad de nosotros
Sagrada Hostia, Desconsiderada por los soberbios
Ten piedad de nosotros
Sagrada Hostia, Profanada por los impíos
Ten piedad de nosotros
Sagrada Hostia, Abandonada por los impíos
Ten piedad de nosotros
Sagrada Hostia, Víctima de Reparación por los pecados del Mundo
Ten piedad de nosotros

Por todas las blasfemias contra el Santo Nombre de Dios,
Perdón, Señor, perdón.
Por la profanación de los Domingos,

Perdón, Señor, perdón.
Por las faltas de respeto y devoción en tu Santo Templo,

Perdón, Señor, perdón.
Por la degradación de la Liturgia en tu Tanto Servicio,

Perdón, Señor, perdón.
Por la pérdida del espíritu de Adoración,

Perdón, Señor, perdón.
Por la frialdad con que te tratan muchos Sacerdotes,

Perdón, Señor, perdón.
Por la falta de “apetito” hacia el Pan de la Vida,

Perdón, Señor, perdón.
Por la indiferencia de los que a diario pasan por delante de tu Santo Templo,

Perdón, Señor, perdón.
Por los sacrilegios con que se profana el Sacramento del Amor,

Perdón, Señor, perdón.
Por tantas Comuniones indignas,

Perdón, Señor, perdón.
Por el abandono de tantos Sagrarios en los que Tú nos esperas,

Perdón, Señor, perdón.
Por las infidelidades de aquellos que se alimentan de Ti,

Perdón, Señor, perdón.
Por los que viven alejados de la Única Iglesia que Tú fundaste,

Perdón, Señor, perdón.
Porque no te amamos con todo nuestro corazón, con toda nuestra alma, con todas nuestras fuerzas,

Perdón, Señor, perdón.
Porque no amamos a nuestros hermanos como Tú nos amas,

Perdón, Señor, perdón.
Porque no tenemos deseos de Perfección,

Perdón, Señor, perdón.
Por tu amarga tristeza al ver la pérdida de tantas almas,

Perdón, Señor, perdón.
Por tu Pasión Eucarística,

Perdón, Señor, perdón.

ORACIÓN
“Oh Jesús, que eres golpeado en nuestras Iglesias a manos de Satanás, te adoro en toadas las Partículas esparcidas, y destrozadas. Tómame por tu Sagrario, por tu Trono, por tu Altar. Me reconozco indigno de ello. Mas Tú quieres estar entre los que te aman, y yo te amo por mí y por quien no te ama. Que el dolor me empurpure como de sangre, a fin de que llegue a ser digno ornamento para recibirte a Ti, que quieres ser semejante a nosotros en esta hora del poder de las tinieblas. Que mi amor sea lámpara que arda delante de Ti, Santísimo, y mi holocausto, incienso” – Así sea.

¡BENDITO, ALABADO, ADORADO Y AMADO SEAS POR SIEMPRE, JESÚS, EN LOS CORAZONES DE LOS HOMBRES QUE TÚ CREASTE!

AVE CRUX, SPES UNICA





O Crux ave, spes unica,
hoc Passionis tempore!
piis adauge gratiam,
reisque dele crimina.

¡Salve, oh cruz, nuestra única esperanza,
en estos tiempos difíciles!
Damos gracias por tu piedad,
perdona nuestros pecados.

miércoles, 28 de mayo de 2014

COMISARIADO EL INSTITUTO DE FRANCISCANAS DE LA INMACULADA



El Cardenal Braz de Aviz, Prefecto de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada, ha anunciado a la Madre general de las Franciscanas de la Inmaculada, el nombramiento, con efecto inmediato, de una “Visitadora” para el Instituto.
Según informa Corrispondenza Romana, la visitadora contará con poderes de férreo control, que de hecho equivale a aquellos de una “comisaria”.
En la Casa General de Frattocchie se presentó, ipso facto, Sor Fernanda Barbiero, del Instituto de Hermanas Maestras de Santa Dorotea, una religiosa adulta y de tendencia “progresista” y moderadamente feminista.
Las Hermanas Franciscanas de la Inmaculada son una orden religiosa de Derecho Pontificio , que se distingue por la juventud de sus miembros, el elevadísimo número de vocaciones y sobre todo por el rigor con el que viven su carisma, de acuerdo con la Regla de San Francisco de Asís.
El 11 de julio de 2013, el Cardenal Braz de Aviz confió el gobierno de los Franciscanos de la Inmaculada a un “comisario apostólico”, que en menos de un año ha conseguido alterar el orden que reinaba en la Congregación, lo que ha obligado a muchos de los frailes a pedir la dispensa de sus votos para salir de un Instituto ahora reducido a un campo en ruinas y buscar otra manera de vivir su propia vocación.
El caso de las franciscanas que ahora se abre es aún más grave que el del Instituto masculino, si cabe. El pretexto para la “visita” y luego el comisariado de los frailes fue la presencia de un grupo pequeño y agresivo de “disidentes”, alentado y alimentado desde el exterior. No se ha manifestado disenso, sin embargo, entre las hermanas, que viven en un espíritu de unidad y amor fraternal.
Fuente: Corrispondenza Romana

ORACIÓN
Madre del Buen Consejo: Ilumina la mente de los que deben decidir sobre la libertad y la vida de los ajusticiados: Concédeles el don que Tú has tenido para hacer lo que Dios quiere y no lo que los poderes de las sombras, los intereses mezquinos, soplan al oído de los Jueces para ganar terrenos de poder y pisotear los derechos humanos.
Madre del Corazón Inmaculado: Borra de los Estrados Judiciales toda corrupción que lleve a vender a un hermano, como a José, hijo de Jacob... que lleve a entregar a un Amigo a los verdugos, como Judas al Señor...
Borra la corrupción de las argucias procesales que se ponen por encima de la Ley y la manipulan...
Borra el orgullo de quien prejuzga y pone su ego por encima de la Justicia misma...
Borra del Poder Judicial la Omnipotencia que los hace dueños del destino de su prójimo y los vuelve impiadosos y arrogantes con quien tan solo es señalado por un delito...
Madre de los Condenados injustamente como tu Hijo: abrázalos con el mismo cariño y Piedad que lo hiciste a tu Amado Jesús al pie de la ignominiosa Cruz y acompáñalos en el Calvario de sus días grises con la luz de tu presencia...
Madre de los torturados por los linchamientos públicos: Levanta tu voz tierna para decir BASTA YA a los gritos de - ¡Crucifícalo, Crucifícalo!
Virgen de la Justicia: Señora Abogada nuestra:
Ven, quédate aquí, en nuestra Tierra sedienta de Ti.
Camina junto a nuestro Pueblo sufrido y escéptico, y dales el don de la Esperanza para que no se cansen de golpear las puertas de la Equidad y la Verdad.
Libra las batallas pendientes contra el Mal que quiere encarnarse en resoluciones injustas, pactos corruptos, condenas sociales, ajusticiamientos mediáticos, mentiras y difamaciones motivadas por la envidia y el rencor.
Por eso Madre: Libra a los inocentes de las garras de la injusticia y que ni un solo minuto se estigmatice a un bueno con castigos injustos o prisiones opresoras...
Haz que descienda la prudencia y el buen corazón a quien por resentimientos se siente tentado a un Falso Testimonio.
Dale a quien investiga la luz de una pista real y aléjalos de los fuegos artificiales de las pruebas falsas.
Ilumina a los Jueces en sus decisiones para que se entreguen plenamente al Bien, al Derecho y el Amor Social.
Que la Balanza que Tú llevas, Virgen Santa de la Justicia, esté siempre inclinada del lado de la Ley y de la Vida, del Bien y la Verdad.
Amén

martes, 27 de mayo de 2014

INCENDIO EN LA GRUTA DE LA NATIVIDAD


Una cortina se incendió en la Iglesia de la Natividad en Belén, que se alza sobre el lugar donde nació Jesús.

El padre Ibrahim Faltas descartó un incendio intencional, señalando que una vela caída provocó las llamas, que causaron daños menores.

Apenas 2 días antes, el Papa Francisco visitó el lugar durante su visita de 3 días a Tierra Santa.

La Iglesia de la Natividad en Belén, Cisjordania, se alza sobre la gruta considerada tradicionalmente el lugar donde nació Jesús. Es uno de los sitios más sagrados del cristianismo.








lunes, 26 de mayo de 2014

LOS CRISTIANOS EN EL MUNDO


En cuanto al misterio de la religión propia de los cristianos, no esperes que lo podrás comprender de hombre alguno. Los cristianos no se distinguen de los demás hombres ni por su tierra, ni por su lengua, ni por sus costumbres. En efecto, en lugar alguno establecen ciudades exclusivas suyas, ni usan lengua alguna extraña, ni viven un género de vida singular. La doctrina que les es propia no ha sido hallada gracias a la inteligencia y especulación de hombres curiosos, ni hacen profesión, como algunos hacen, de seguir una determinada opinión humana, sino que habitando en las ciudades griegas o bárbaras, según a cada uno le cupo en suerte, y siguiendo los usos de cada región en lo que se refiere al vestido y a la comida y a las demás cosas de la vida, se muestran viviendo un tenor de vida admirable y, por confesión de todos, extraordinario. Habitan en sus propias patrias, pero como extranjeros; participan en todo como los ciudadanos, pero lo soportan todo como extranjeros; toda tierra extraña les es patria, y toda patria les es extraña.


Se casan como todos y engendran hijos, pero no abandonan a los nacidos. Ponen mesa común, pero no lecho. Viven en la carne, pero no viven según la carne. Están sobre la tierra, pero su ciudadanía es la del cielo. Se someten a las leyes establecidas, pero con su propia vida superan las leyes. Aman a todos, y todos los persiguen. Se los desconoce, y con todo se los condena. Son llevados a la muerte, y con ello reciben la vida. Son pobres, y enriquecen a muchos (/2Co/06/10). Les falta todo, pero les sobra todo. Son deshonrados, pero se glorían en la misma deshonra. Son calumniados, y en ello son justificados. «Se los insulta, y ellos bendicen» (1 Cor 4, 22). Se los injuria, y ellos dan honor. Hacen el bien, y son castigados como malvados. Ante la pena de muerte, se alegran como si se les diera la vida. Los judíos les declaran guerra como a extranjeros y los griegos les persiguen, pero los mismos que les odian no pueden decir los motivos de su odio.


Para decirlo con brevedad, lo que es el alma en el cuerpo, eso son los cristianos en el mundo. El alma está esparcida por todos los miembros del cuerpo, y los cristianos lo están por todas las ciudades del mundo. El alma habita ciertamente en el cuerpo, pero no es del cuerpo, y los cristianos habitan también en el mundo, pero no son del mundo. El alma invisible está en la prisión del cuerpo visible, y los cristianos son conocidos como hombres que viven en el mundo, pero su religión permanece invisible. La carne aborrece y hace la guerra al alma, aun cuando ningún mal ha recibido de ella, sólo porque le impide entregarse a los placeres; y el mundo aborrece a los cristianos sin haber recibido mal alguno de ellos, sólo porque renuncian a los placeres. El alma ama a la carne y a los miembros que la odian, y los cristianos aman también a los que les odian. El alma está aprisionada en el cuerpo, pero es la que mantiene la cohesión del cuerpo; y los cristianos están detenidos en el mundo como en un prisión, pero son los que mantienen la cohesión del mundo. El alma inmortal habita en una tienda mortal, y los cristianos tienen su alojamiento en lo corruptible mientras esperan la inmortalidad en los cielos. El alma se mejora con los malos tratos en comidas y bebidas, y los cristianos, castigados de muerte todos los días, no hacen sino aumentar: tal es la responsabilidad que Dios les ha señalado, de la que no sería licito para ellos desertar.


Porque, lo que ellos tienen por tradición no es invención humana: si se tratara de una teoría de mortales, no valdría la pena una observancia tan exacta. No es la administración de misterios humanos lo que se les ha confiado. Por el contrario, el que es verdaderamente omnipotente, creador de todas las cosas y Dios invisible, él mismo hizo venir de los cielos su Verdad y su Palabra santa e incomprensible, haciéndola morar entre los hombres y estableciéndola sólidamente en sus corazones. No envió a los hombres, como tal vez alguno pudiera imaginar, a un servidor suyo, algún ángel o potestad de las que administran las cosas terrenas o alguno de los que tienen encomendada la administración de los cielos, sino al mismo artífice y creador del universo, el que hizo los cielos, aquel por quien encerró el mar en sus propios limites, aquel cuyo misterio guardan fielmente todos los elementos, de quien el sol recibió la medida que ha de guardar en su diaria carrera, a quien obedece la luna cuando le manda brillar en la noche, a quien obedecen las estrellas que son el séquito de la luna en su carrera; aquel por quien todo fue ordenado, delimitado y sometido: los cielos y lo que en ellos se contiene, la tierra y cuanto en la tierra existe, el mar y lo que en el mar se encierra, el fuego, el aire, el abismo, lo que está en lo alto, lo que está en lo profundo y lo que está en medio. A éste envió Dios a los hombres. Ahora bien, ¿lo envió, como alguno de los hombres podría pensar, para ejercer una tiranía y para infundir terror y espanto? Ciertamente no, sino que lo envió con bondad y mansedumbre, como un rey que envía a su hijo rey, como hombre lo envió a los hombres, como salvador, para persuadir, no para violentar, ya que no se da en Dios la violencia. Lo envió para invitar, no para perseguir; para amar, no para juzgar. Ya llegará el día en que lo envíe para juzgar, y entonces ¿quién será capaz de soportar su presencia?
* Carta a Diogneto (Siglo II)

jueves, 22 de mayo de 2014

LLEVÓ EN SU CUERPO LOS ESTIGMAS DEL SEÑOR




Carta de S.S. Juan Pablo II en el sexto
 centenario del nacimiento de Santa Rita



Al venerable hermano

Ottorino Pietro Alberti

Arzobispo de Espoleto y Obispo de Nursia

Con la reciente carta, relativa a las celebraciones todavía en curso para el VI Centenario del nacimiento de Santa Rita de Casia, Ella ha querido renovarme la amable invitación, ya manifestada en marzo del pasado año, para que con una visita especial, o con otra iniciativa, participe en persona en el unánime coro de elogios que se escucha en el mundo cristiano en honor de Colei, que mi antecesor León XIII llamó "la perla preciosa de Umbria".
Tal petición, que se ha compartido no solo con los hijos de las diócesis a Usted confiada, sino con la innumerable lista de los devotos de la Santa, encuentra en mí junto al vivo deseo de no dejar pasar el presente "Año Ritiano" sin que yo recuerde y exalte su mística y su personalidad. Por eso, uniéndome espiritualmente a los peregrinos, que también de tierras lejanas llegan en gran muchedumbre a Casia, estoy contento de poner una flor de piedad y de veneración sobre su tumba, en recuerdo de los insignes ejemplos de su alta virtud.
Estoy también agradecido a la Providencia divina por algunos singulares enlaces, que unen el presente Centenario a otros aniversarios altamente sugestivos para quien sabe leer en la justa la perspectiva las vicisitudes de la historia humana. No olvido, en efecto, la visita que hice a Norcia para rendir homenaje, a quince siglos de su nacimiento, al gran patriarca del monascato occidental, San Benito. Ni puedo omitir la reciente apertura del Centenario de San Francisco de Asís. Son dos figuras, éstas, al lado de las cuales la humilde mujer de Roccaporena se coloca como una hermana menor, como si a componer un "tríptico ideal" de radiante santidad, que atestigua y conjuntamente solicita profundizar, en el sentido de la coherencia, sobre el ininterrumpido filón de gracia que surca la tierra fecunda de la Umbría cristiana.



Pero no puedo omitir una otra feliz coincidencia, reconocible en el hecho que Rita nace un año después la muerte de Catalina de Siena, como para marcar una continuidad de maravilloso y espiritual significado.
Es conocido por todos cómo el itinerario terreno de la Santa de Casia se articula en diversos estados de vida, cronológicamente sucesivos y -lo que más cuenta- dispuestos en un orden ascendente, que marca las diversas fases de desarrollo de su vida de unión con Dios. ¿Por qué Rita es santa? No tanto por la fama de los prodigios que la devoción popular atribuye a la eficacia de su intercesión cerca de Dios omnipotente, como por la estupefacta "normalidad" de la existencia diaria, que ella vivió primero como esposa y madre, luego como viuda y finalmente como monja agustina.
Era una desconocida joven de esa tierra que, en el calor del ambiente familiar, había aprendido la costumbre de la tierna piedad hacia el Creador en la visión, que es ya una lección, del sugestivo escenario de la cadena de los Apeninos. ¿Dónde estuvo entonces la razón de su santidad? ¿y dónde lo heroico de su virtud? Vida tranquila era la suya, sin el relieve de acontecimientos exteriores cuando, contra su propias preferencias, abrazó el estado matrimonial. Así se hizo esposa, revelándose inmediatamente como verdadero ángel del hogar y desarrollando una acción decisiva al transformar las costumbres de su consorte. Fue también madre, alegrándose del nacimiento de dos hijos, por los cuales, después del asesinato de su marido, tanto tembló y sufrió, en el temor de que en sus almas surgiera la sombra de un deseo de venganza contra los asesinos de su padre. Por su parte, habían sido generosamente perdonados, determinando también la pacificación de las familias.





Ya viuda, poco después se vio privada de sus hijos, de modo que, siendo libre de todo vínculo terreno, decidió darse enteramente a Dios. Pero también por esta decisión sufrió pruebas y contradicciones, hasta que pudo realizar el ideal de su primera juventud, consagrándose al Señor en el monasterio de Santa María Magdalena. Su humilde existencia, que aquí pasó cerca de cuarenta años, fue igualmente desconocida a los ojos del mundo, abierta sólo a la intimidad con Dios. Fueron, aquellos, años de asidua contemplación, años de penitencia y de oración, que culminaron en aquella llaga que le se imprimió dolorosamente sobre la frente. Precisamente este signo de la espina, al otro lado de del sufrimiento físico que le procuraba, fue como el sello de su pena interior, pero fue sobre todo la prueba de su directa participación en la Pasión del Cristo, centrada -por así decir- en uno de los momentos más dramáticos, como lo fue el de la coronación de espinas en el pretorio de Pilato (cfr. Mt 27, 29; Me 15, 17; Gv 19, 2.5).



Es aquí, por tanto, donde es necesario reconocer el vértice de su mística, aquí la profundidad de un sufrimiento, que llegó a determinar una huella somática externa. Y aquí todavía se descubre un significativo punto de contacto entre los dos hijos de la Umbría, Rita y Francisco. En realidad, lo que fueron las estigmas para el Poverello, lo fue la espina para Rita. Esto es, un signo, aquellas y ésta de directa asociación con la Pasión redentora de Cristo Señor, coronado de punzantes espinas después de la cruenta flagelación y, sucesivamente, traspasado por clavos y golpeado por la lanza sobre el Calvario.
Tal asociación se estableció en ambos Santos sobre la común base de aquel amor, que tiene una intrínseca fuerza de unidad. Y, precisamente por aquella espina dolorosa la Santa de las rosas se hizo símbolo viviente de amorosa coparticipación a los sufrimientos del Salvador. ¡La rosa del amor está fresca y fragante, cuando es asociada con la espina del dolor! Así fue en Cristo, modelo supremo; así en Francisco; así en Rita. En verdad, también ella ha sufrido y amado. Ha amado a Dios y ha amado a los hombres, ha sufrido por amor a Dios y ha sufrido a causa de los hombres.

Por tanto, lo gradual que sucede en los varios estadios de su camino terreno, revela en la Santa un paralelo crecimiento de amor hasta aquel estigma que, siendo de la medida adecuada de su elevación, explica al mismo tiempo por qué su dulce figura es tan atractiva entre los fieles, que celebran su nombre y exaltan de ella su admirable poder cerca del trono de Dios.
Hija espiritual de San Agustín, ella puso en práctica su enseñanzas, sin haberlas leído en los libros. Aquel que a las mujeres consagradas había recomendado tanto "seguir al cordero dondequiera que vaya" y "contemplar con los ojos interiores las llagas del Crucifijo, las cicatrices del Resucitado, la sangre del Moribundo (...), todo sopesado sobre la balanza de la caridad" (cfr. De sancta virginitate, 52, 54, 55; PL 40, 428), fue obedecido "a litteram" por Rita que, especialmente en cuarenta años de claustro, demostró la continuidad y la firmeza del contacto establecido con la víctima divina del Gólgota.
La lección de la santa -vale precisar- se concentra en estos elementos típicos de espiritualidad: la oferta del perdón y la aceptación del sufrimiento, no ya como una forma de pasiva resignación o como fruto de femenina debilidad, sino como fuerza de aquel amor hacia Cristo que, en el recordado episodio de la coronación, padeció, con las otras humillaciones, una burla atroz de su majestuosidad.



Alimentado por esta escena, que no sin motivo la tradición de la Iglesia ha insertado en el centro de los "misterios dolorosos" del Santo Rosario, el misticismo de Rita se volvía a unir al mismo ideal, experimentado en primera persona y no simplemente enunciado, del apóstol Pablo: Ego... stigmata Domini Iesu in corpore meo porto –Yo... llevo en mi cuerpo los estigmas del Señor Jesús-- (Gal 6, 17); Adimpleo ea, quae desunt passionimi Christi in carne meo prò corpore eius, quod est Ecclesia –Completo en mi carne lo que falta a los sufrimientos de Cristo, por el bien de su cuerpo, que es la Iglesia-- (Col 1,24). También este ulterior elemento hace notar la destinación eclesial de los méritos de la Santa, segregada por el mundo e íntimamente asociada al Cristo sufriente. Ella ha hecho refluir en la comunidad de los hermanos el fruto de este suyo "compadecer".
Rita es al mismo tiempo la "mujer fuerte" y la "virgen sabia", de lo cual nos habla la Sagrada Escritura (Pro 31,10ss; Mt 25, 1 ss), que indica en todos los estados de vida, y no sólo de palabras, cuál es el camino de la auténtica la santidad como secuela fiel de Cristo hasta la cruz. Por esto, a todos sus devotos, esparcidos por todas partes del mundo, he deseado proponer de nuevo la dulce y doliente figura con el deseo de que que, inspirándose en ella, quieran corresponder -cada uno en el estado de vida que le es propio- a la vocación cristiana en sus exigencias de caridad, de testimonio y de coraje: sic luceat lux vostra coram hominibus... –Así debe brillar vuestra luz ante los hombres...-- (Mt 5, 16).
Con este mismo objetivo confío a Usted la presente Carta que, en la luz del Centenario Ritiano, ella querrá llevar a conocimiento de los fieles con el estímulo y el consuelo de la Bendición Apostólica.

 Vaticano, 10 febrero del año 1982, cuarto de Nuestro Pontificado.

SANTA RITA, UN MODELO DE VIDA CRISTIANA PARA TODOS


Rita nació en el año 1381 a Roccaporena, un pueblecito situado en el municipio de Casia, provincia de Perugia, (Italia) de Antonio Lotti y Amata Ferri. Sus progenitores eran muy creyentes con una situación económica no acomodada pero decorosa y tranquila. La historia de Santa Rita está llena de acontecimientos extraordinarios y uno de éstos se dio en su infancia. La pequeña, dejada por algún momento sin custodia en su cuna en el campo mientras los progenitores trabajaban la tierra, fue rodeada por un enjambre de abejas. Estos insectos recubrieron a la pequeña, pero extrañamente no la pincaron. Un campesino, que al mismo tiempo se hirió la mano con la hoz y acudió corriendo para curarse, pasó delante de la cuna donde estaba Rita. Al ver a las abejas que zumbaban en torno a la bebé, intentó expulsarlas, pero con gran estupor, mientras sacudía los brazos para alejarlas, la herida se cicatrizaba completamente.

La tradición nos transmite que Rita tenía una precoz vocación religiosa y que un Ángel bajaba del cielo a visitarla cuando se retiraba a rezar en un pequeño desván.

SANTA RITA ACEPTA SER ESPOSA
Rita habría deseado hacerse monja sin embargo aún joven (cerca de los 13 años ) sus progenitores, ya ancianos, la prometieron como esposa a Paolo Ferdinando Mancini, un hombre conocido por su carácter pendenciero y brutal. Santa Rita, acostumbrada al deber, no opuso resistencia y se casó con el joven oficial que comandaba la guarnición de Collegiacone, presumiblemente a los 17 ó 18 años, es decir alrededor de los años 1387-1388.

Del matrimonio entre Rita y Pablo nacieron dos hijos gemelos varones; Giangiacomo Antonio y Pablo María, que tuvieron todo el amor, la ternura y los cuidados de la mamá. Rita consiguió, con su tierno amor y gran paciencia transformar el carácter del marido y hacerlo más dócil.

La vida conyugal de Santa Rita después de 18 años, fue trágicamente rota con el asesinato del marido, cerca de la Torre de Collegiacone a algunos kilómetros de Roccaporena mientras volvía a Casia.

EL PERDÓN
Rita estuvo muy afligida por la atrocidad del acontecimiento, buscó refugio y consuelo en la oración, y con asiduidad invocaba en sus oraciones el perdón de Dios para los asesinos de su marido.
Al mismo, tiempo Santa Rita emprendía acciones para llegar a la pacificación de sus hijos, que sentían como un deber la venganza por la muerte del padre.
Rita, al darse cuenta de que las voluntades de los jóvenes no se doblegaban al perdón, rogó al Señor ofreciendo la vida de sus hijos para no verlos manchados de sangre. "Ellos morirían a menos de un año de la muerte del padre".

Cuando Santa Rita estuvo sola, tenía poco más de 30 años y sintió renacer y madurar en su corazón el deseo de seguir aquella vocación que de joven había deseado realizar.

SANTA RITA SE HACE MONJA
Rita pidió entrar como monja en el monasterio de Santa María Magdalena, para su bien, pero por tres veces no fue admitida, por ser viuda de un hombre asesinado.
La leyenda narra que Santa Rita logró superar todas las barreras y las puertas cerradas gracias a la intercesión de: San Juan Batista, San Agustín y San Nicolás de Tolentino que la ayudaron a emprender el vuelo del "Escollo" hasta el Convento de Casia, en un modo para Ella incomprensible. Las monjas, ante el prodigio, la acogieron entre ellas y allí Rita permaneció 40 años sumergida en la oración.



EL MILAGRO SINGULAR DE LA ESPINA
Era el viernes Santo del 1432 y Santa Rita volvía al Convento profundamente turbada, después haber oído a un predicador evocar con ardor los sufrimientos de la muerte de Jesús, y permaneció rezando delante del crucificado en contemplación. En un impulso de amor, Santa Rita preguntó a Jesús si podría compartir, al menos en parte, sus sufrimientos. Sucedió entonces el prodigio: Santa Rita fue traspasada de una de las espinas de la corona de Jesús. Fue un espasmo sin fin. La santa llevó esta llaga en la frente por 15 años como sello de amor.

VIDA DE SUFRIMIENTO
Para Rita los últimos 15 años fueron de sufrimiento sin tregua, su perseverancia en la oración la llevó a pasar también 15 días sin interrupción en su celda "sin hablar con nadie más que con Dios". Aemás llevaba también el cilicio que le procuraba sufrimiento, y sometía su cuerpo a muchas mortificaciones: dormía en el suelo hasta que se enfermó, permaneciendo en este estado los últimos años de su vida.





EL PRODIGIO DE LA ROSA
Aproximadamente cinco meses antes de la muerte de Rita, un día de invierno con la temperatura muy baja y con un manto de nieve que cubría todo, una pariente le hizo una visita, y al despedirse, preguntó a la Santa si deseaba algo. Rita respondió que deseaba una rosa de su huerto. De regreso en Roccaporena la pariente fue al jardín y, con gran asombro, vio una bella rosa abierta, la cogió y se la llevó a Rita.

Así Santa Rita se hizo la Santa del "espina" y de la "Rosa".

Antes de cerrar los ojos para siempre tuvo la visión de que Jesús y la Virgen María la invitaban al Paraíso. Una de sus hermanas vio a su alma subir al cielo acompañada de Ángeles y, al mismo tiempo, las campanas de la iglesia empezaron a sonar solas mientras un perfume suave se extendió por todos los rincones del Monasterio. Desde su cámara se vio el resplandor de una luz muy luminosa, como si hubiera entrado el Sol. Era el 22 mayo del 1447.

Santa Rita de Casia fue beatificada 180 años después de su fallecimiento y proclamada Santa 453 años después de su muerte.




ABOGADA DE LOS IMPOSIBLES
De la biografía de Rita, reproducida en el primer volumen de la Documentación antigua del Padre Cavallucci, se lee que desde su muerte, cerca de la urna de Rita se veían "muchas imágenes de plata, de cera, de figuras en mesas y en tela, de hierros, de cadenas de clavos, de cañas rotas de escopeta... (todo) fielmente registrado por los Notarios en presencia de testigos».


«Cerca del sagrado cuerpo de Rita --continúa el biógrafo--, se ven inumerables enfermos y heridos curados de graves enfermedades: ciegos que fueron iluminados, mudos que recobraron el habla, y cojos que fueron curados"; muchos endemoniados se veían liberados y no falta quien afirma haber sido salvado de la muerte gracias a la intercesión de sor Rita.
En esta biografía se citan cuarenta y seis milagros, de los cuales, los primeros once se remontan al año 1457, de lo que se deduce que fueron reportados por el Notario Domenico Angeli, y son los siguientes:
  1. El 25 de mayo 1457 Battista D’Angelo del Colgiacone, afectado de ceguera, mandó devotos a rogar al Señor delante del cuerpo de la Beata Rita y, por misericordia infinita sus plegarias fueron atendidas: recobró la vista.
  2. El 25 del mismo mes Lucrezia de Pablo de Colforcello enferma durante varios años, hinchada por hidropesía, fue llevada ante el cuerpo de la Beata Rita. Después de haber rezado devotas oraciones, regresó curada.
  3. También, en el mismo mes, una mujer llamada Cecca de Antonio, sorda durante cinco años consecutivos, invocando al omnipotente Dios y a la Beata Rita fue liberada, con claros signos, en presencia de varios testigos.
  4. El 29 del mismo mes, Salimene de Antonio del Poggio, que tenía un dedo de la mano privado de sensibilidad por largo tiempo, lo acercó al cuerpo de la Beata con reverencia y humildad, devoción y fe, y fue sanado en presencia de mucha gente derramando muchas lágrimas de agradecimiento al Señor y a la Beata Rita.
  5. El último día de mayo de 1457, Giacomuccia de Leonardo de Ocone, atormentada muchos años de grandes dolores a las piernas, y que por este grande e intenso dolor comía poquísimo desde hacía dos años, fue llevada en brazos ante el cuerpo de la Beata, donde se encomendó al Señor y a ella, se detuvo ocho días en la iglesia, después de lo cual fue curada y, con mucho gozo, dio gracias a Dios y la Beata Rita.
  6. En el mísmo día, Cecca de Gio, de Biselli (Norcia), nacida muda como testimoniaron los parientes, vino a visitar el cuerpo de la Beata. Hechas las oraciones comenzó a hablar y a recitar el Ave Maria y otras palabras, con gran estupor de los parientes y de todo el pueblo.
  7. El 2 de junio 1457, Matteo del Rey de Ocone tenía a Bernardo, su hijo, afectado por una piedra dentro a la vejiga que le producía un intenso dolor. Rogó a la Beata Rita por cuyos méritos fue liberado de la enfermedad.
  8. El 3 del mismo mes Spirito d’Angelo de Casia había padecido una ciática con intenso dolor durante cuatro años eguidos. Recurriendo a la Beata Rita fue sanado.
  9. El 7, Mattia de Cancro de Rocca Indulsi (Norcia), muda de nacimiento, fue conducida por sus parientes ante el cuerpo de la Beata y, después de las oraciones, obtuvo la gracia de Dios. Ante el estupor de la gente, la oyeron hablar. Por éste milagro se hicieron procesiones de todos los Sacerdotes y un sermón del maestro Giovanni Pauletti de Casia.
  10. En el mismo día, Cecco de Antonio, de San Cipriano, mudo del nacimiento, fue conducido por su padre ante el cuerpo de la Beata Rita y, después de dos días de oración, recibió la gracia de la palabra con gran estupor de todo el pueblo.
  11. El 8 de junio 1457, Lucia de Santi, del Castel de Santa Maria de Norcia, ciega de un ojo y con escasa visión en el otro, fue llevada ante el cuerpo de la Beata Rita. Después de quince días de intensas oraciones se le abrieron los dos ojos y vió. Con infinitas lágrimas, dio gracias a Dios.
Como se puede constatar, las curaciones milagrosas se refieren a enfermedades muy diversas, también ceguera y mutismo congénitos.
Los milagros que sucedieron entre 1447 y 1603 tratan de curaciones de enfermedades de diverso género: parálisis total, piedra en la "vejiga", dificultad de palabra, heridas incurables y en putrefacción, abscesos en garganta, locura, huesos rotos, llagas, hemorragias, posesiones de "espíritus inmundos", peste, cáncer de garganta y más.


Además de citar los milagros comprobados, el Padre Cavallucci informa que " todavía hoy, en nuestros días, al abrir la caja y la urna donde se encuentra aquel cuerpo se siente una fragancia que parece hecha de varias mixturas odoríferas y que no se percibe sino con gran dificultad en cuanto se abre la caja. Sin embargo, cada vez que nuestro Señor Jesúscristo concede alguna gracia por la intersección de la Beata Rita, ésta fragancia es sentida durante muchos días, con gran facilidad, por toda la casa.
El Padre Cavallucci añade también que las monjas del convento acostumbraban, en el mes de mayo, a preparar unos pequeños panes para el día de la fiesta de monja Rita, el día 22, que distribuían entre los más necesitados y que " después de haber saboreado éste pan" fueron liberados de fiebres y otras enfermedades.
Así mismo, el aceite de la lámpara que estaba constantemente encendida sobre la caja de Rita era considerado milagroso por las monjas. Ellas "dan el aceite de esta lámpara para untar los miembros de los cuerpos doloridos por cualquier causa, quedando demostrado que este aceite ha obrado grandes beneficios a muchos".